La carrera de Alf-Inge Haaland
La figura de Erling Haaland está causando sensación en el fútbol europeo pero 20 años antes de su irrupción, su padre Alf-Inge Haaland ya llevaba una larga carrera a sus espaldas como jugador profesional.
El padre de la emergente estrella noruega se formó, como su hijo, en el Bryne FK. Tras destacar como un solvente mediocentro defensivo y zaguero central, dio el gran salto al extranjero. En 1993, Alf firmó por el Nottingham Forest donde jugó durante 4 temporadas.
Tras el descenso del Forest, Haaland fichó en 1997 por el Leeds United para seguir jugando en la Premier.
El Día que Roy Keane se Vengó del Padre de Haaland (2001)
Primer encuentro con Roy Keane
El 27 de septiembre de 1997, el Leeds recibió en Elland Road al Manchester United. Esa tarde, Haaland jugó como mediocentro defensivo y con los locales ganando 1-0, Roy Keane se internó en el área en los últimos minutos del juego. Haaland se cruzó en su camino para cortarle el paso y sacó una falta que provocó la caída del centrocampista irlandés.
El noruego fue a recriminarle la entrada a Keane y pensó que el capitán del United estaba fingiendo. Lo que no sabía Haaland es que el irlandés se estaba retorciendo de dolor. Keane se había lesionado y acababa de romper los ligamentos de la rodilla y permaneció varios meses de baja.
Keane vs Haaland: Una Historia de una Venganza
Tras ese primer incidente, Haaland y Keane se volvieron a cruzar en un par de partidos y todo parecía olvidado. Sin embargo la carrera del noruego cambiaría el 21 de abril de 2001. "Alfie" había fichado esa temporada por el Manchester City y aquella tarde jugaba el apasionado derbi de la ciudad ante United.
Los diablos rojos ya eran campeones de Liga pero podían poner el colofón a la temporada provocando el descenso de los citizens. En el minuto 86 y con 1-1 en el marcador, un balón divido cruzó los caminos de Keane y Haaland cuatro años después.
El noruego se anticipó a la jugada y Keane, muy tarde y con mala intención, realizó una criminal entrada a la rodilla de su rival.
El colegiado no dudó el expulsar al capitán de United pero Haaland se quedó dolorido en el césped. El noruego se lesionó de la rodilla izquierda y Keane culminó su venganza dirigiéndose a su víctima: “¡Toma esta, bastardo! Ya no volverás a reírte de mí por lesiones fingidas”.
Adiós al fútbol
Aquel partido fue el último en el que Alf-Inge Haaland pudo jugar 90 minutos. Disputó 2 partidos más pero tuvo que ser operado hasta en cuatro ocasiones y nunca llegó a recuperarse. Haaland se retiró del fútbol profesional en 2003, a los 31 años, y posteriormente volvió a Noruega para trabajar en el sector petrolífero.
Años más tarde y Lejos de arrepentirse Keane reconoció en su primera biografía que había lesionado a Haaland a propósito: “El que la hace la paga y él tuvo su recompensa. ¡A la mierda con él! Lo que va, vuelve. Él me pegó a mí y mi actitud es ojo por ojo. Hay cosas que lamento en mi vida y esa no es uno de ellas”
En 2003 Haaland denunció por casi 10 millones de dólares a Keane pero perdió el juicio al no poder demostrar que su lesión de la rodilla izquierda (la contraria donde le impactó) fue causada por la entrada del jugador del Manchester United.
Años más tarde en una entrevista Haaland reconoció su frustración por lo sucedido: "Llevaba ocho años sin lesionarme y fueron mis últimos 90 minutos completos. La gente puede juzgarlo como quiera. Luego me enteré que lo había hecho a propósito. Me parece un poco triste, triste para el fútbol. Para mí no fue bueno evidentemente".
Pese al triste final de carrera, Alfie se pudo centrar en su familia y en la educación de su hijo Erling, que en pocos años se ha convertido en una de las mayores estrellas del fútbol europeo.
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