¿Quiénes han sido los campeones mas sorprendentes en la historia de las ligas europeas?
El Girona se ha convertido en el equipo revelación de las grandes ligas europeas y no sería la primera vez, que un club modesto es capaz de romper con las apuestas y lograr el campeonato. Hoy en Memorias del fútbol, recordaremos a los equipos modestos que dieron la sorpresa y ganaron alguna de las 5 grandes ligas.
Modestos que Ganaron la Ligas europeas
Ipwich Town (1961-1962)
La primera gran sorpresa de la primera división inglesa la protagonizó el Ipswich Town, que un año después de subir de segunda por primera vez, sorprendió a todos ganando la Liga de 1962. Como curiosidad, aquel Ipswich ganó el campeonato pese a perder 10 partidos y que los 93 goles que marcó, se repartieron únicamente entre seis jugadores.
Sir Alf Ramsey era el técnico de aquel gran equipo, al que consiguió llevar a la gloria después de cogerlo en la tercera categoría del fútbol inglés. Tras su éxito en el Ipswich, Ramsey fue nombrado seleccionador inglés e hizo historia con los Three Lions al conquistar el primer y único Mundial para Inglaterra.
Derby County (1971-72)
Diez años después el Derby County de Brian Clough replicó aquella gesta. El técnico inglés revolucionó el club, consiguió el ascenso en 1970 y tras quedar en cuarta posición en su primera temporada en la primera, logró proclamarse campeón por sorpresa en 1972. En 1975 el equipo volvería a ser campeón, ya sin Clough, pero ese primer título fue un soplo de aire fresco para un club que había estado en la Championship durante una década.
Nottingham Forest (1977-78)
El Nottingham Forest fue el siguiente banquillo de Brian Clough, donde vivió otro cuento de hadas aún más increíble, ya que subió de segunda división en 1977 y fue capaz de interrumpir el dominio del Liverpool de Bob Paisley un año después. El Forest acertó con los fichajes y logró la increíble hazaña de ganar dos Copas de Europa consecutivas, convirtiéndose en el único club que posee más Copas de Europa que Ligas en su Palmarés.
Real Sociedad (1980-1981)
A comienzos de la década de los ochenta, la Real Sociedad conjuntó un equipo de mucha calidad y coraje, que dirigidos por Alberto Ormetxea logró las dos únicas ligas de su historia. Los Zamora, Satrustegui o López Ufarte consiguieron imponerse a los grandes del fútbol español y, tras ganarle la liga al Madrid en 1980, consiguieron revalidar el título por delante del Barcelona un año más tarde.
Hellas Verona (1984-85)
En los años 80 el Calcio era la mejor liga del mundo y nadie podía prever que el modesto Hellas Verona podría ser el campeón del Scudetto de 1985. La aspiración del equipo era alcanzar la zona media pero, para sorpresa de todos lideraron la tabla desde la primera hasta a la última jornada, perdiendo solo dos partidos y sobrándole dos jornadas para celebrar el título.
Osvaldo Bagnoli fue el técnico que obró el milagro de aquel Verona, que basó su éxito en su fortaleza defensiva encajando únicamente 19 goles en todo el campeonato. En el ataque destacó el rendimiento del joven Galderisi y de dos extranjeros indispensables para entender el éxito: el alemán Briegel y el danés Elkjaer Larsen.
Sampdoria (1990-1991)
A principios de los noventa otro equipo se llevó el Scudetto por sorpresa. La Sampdoria había conjuntado un gran equipo y con Vujadin Boskov en el banquillo, supo aprovechar el fin de ciclo del Napoli de Maradona y el Milan de Sacchi. Con Pagluica en la portería y Mancini y Vialli como estrellas atacantes, la Samp logró proclamarse campeón de la Serie A por primera y única vez en su historia.
Leeds United (1991-1992)
En 1992 la sorpresa saltó en Inglaterra, donde el Leeds United conquistó la última liga antes de la fundación de Premier League. El histórico club británico había bajado a segunda en los años ochenta, pero tras su ascenso en 1990 lograron el título en 1992 tras sacar cuatro puntos de ventaja al Manchester United. Wilkinson configuró un equipo muy disciplinado con centro del campo de lujo, que estaba conformado por Gary McAllister y David Batty, con Gordon Strachan y Gary Speed por las bandas.
Blackburn Rovers (1994-95)
En 1994-1995, el Blackburn Rovers se convirtió en campeón de la liga inglesa por primera vez en 81 años. El club de La Rosa llegó desde segunda en 1992 y con el dinero del multimillonario Jack Walker, se reforzó con fichajes de lujo que le llevaron hasta el título. Sus dos figuras más importantes eran su dúo ofensivo, conformado por los ingleses Chris Sutton y Alan Shearer.
El entrenador, Kenny Dalglish, que ya había sido campeón como jugador y entrenador en el Liverpool, lideró al equipo a la victoria en la última jornada… que precisamente se produjo en Anfield.
Aunque fuese a base de millones, que el Blackburn ganase la Premier de 1995 se consideró todo un milagro.
Auxerre (1995-1996)
En 1996 la gran sorpresa se produjo en Francia, donde el Auxerre logró un histórico doblete de Liga y Copa. Aquel equipo estaba entrenado por el legendario técnico, Guy Roux, que dirigió al equipo galo durante la friolera de 44 años. Entre los jugadores más destacados del campeón francés estaba Sabri Lamouchi, Stéphane Guivarc'h, Corentin Martins, Taribo West o Laurent Blanc.
Lens (1997-1998)
Dos temporadas después, la sorpresa de la Ligue 1 fue el Lens, que ganó la Liga francesa, llegó a la final de la Copa y a las semifinales de la Copa de la Liga. El conjunto dirigido por Daniel Leclercq superó a todos sus rivales y sus futbolistas más importantes eran Stéphane Ziani, Vladimir Smicer o el delantero Anton Drobnjak.
Kaiserslautern (1997-98)
En la temporada 1997-1998, el Kaiserslautern era un recién ascendido a la Bundesliga pero se acabó convirtiendo en uno de los campeones más sorprendentes de la historia. El equipo de Otto Rehhagel debutó con una sorprendente victoria frente al Bayern en el Olímpico de Múnich y, desde la primera jornada, se estableció como el mejor equipo del campeonato.
Los 21 goles de Olaf Marschall, el liderazgo de Ciriaco Sforza y la inesperada aparición de Schjonberg, , destacaron en un equipo veterano pero que ya contaba con una joven promesa llamada Michael Ballack.
Boavista (2000-01)
En 1999 el Boavista era ya un equipo respetado en Portugal... pero en un campeonato dominado desde 1947 por Porto, Benfica y Sporting no podía pensarse que llegaría algún ni tan siquiera a luchar por el título. A mediados de noviembre (jornada 12) era cuarto a ocho puntos del Porto, pero a partir de ahí enlazó diez victorias consecutivas, que le catapultaron al liderato al acabar la primera vuelta.
El equipo dirigido por Jaime Pacheco acabó aguantando el primer puesto y conquistó un histórico título cimentado en un equipo que no tenía futbolistas de relumbrón. El centrocampista Petit o el boliviano Erwin Sánchez eran dos de los futbolistas más destacados de aquel equipo.
Wolfsburgo (2008-09)
Bajo las órdenes de Felix Magath, el Wolfsburgo logró una gesta increíble ganando la Bundesliga de 2009. La pareja atacante formada por Džeko y Grafite marcaron 54 de los 81 goles del equipo a lo largo del curso y fueron determinantes para dar al Wolfsburgo el primer torneo liguero de su historia. Los Lobos superaron al Bayern por solo dos puntos pero le infligieron un histórico 5-1 a los bávaros que pasó a la historia.
AZ Alkmaar (2008-2009)
Ese mismo año, la liga holandesa tuvo un inesperado campeón. El AZ Alkmaar rompió el dominio de los tres clásicos de los Países Bajos y ni Ajax, ni PSV ni Feyenoord pudieron quitarle el título al equipo dirigido por Louis Van Gaal. Pese a empezar la Eredivisie con dos derrotas seguidas, el técnico confío en su equipo y consiguió formar un grupo exquisito de jugadores que le llevarían meses después a alcanzar la gloria.
Romero, De Zeeuw, Martens, Mendes da Silva, o Schaars, constituyeron la columna vertebral del equipo junto al pichichi de la competición, Mounir El Hamdaoui, y un joven Mousa Dembélé. Además, el AZ contaba en sus filas con grandes promesas como Graziano Pellè, Héctor Moreno, Jermain Lens o Ragnar Klavan. Una plantilla repleta de buenos futbolistas que, a priori, no figuraba entre las candidatas al título.
FC Twente (2009-2010)
Solo un año después, la Eredivisie volvió a tener un campeón sorpresa y el modesto Twente se hizo con el título. El equipo dirigido por Steve McClaren aventajó en un solo punto al Ajax y basó su efectividad de cara gol gracias a la puntería de costarriqueño Bryan Ruiz. El delantero tico se proclamó máximo anotador del campeonato con 24 goles y junto a Stoch, Nkufo y un joven suplente Luuk de Jong, protagonizaron la mayor gesta de la historia del club de Enschede.
Montpellier (2011-12)
Más cerca del descenso que de Europa al acabar la temporada anterior, el Montpellier no contaba como favorito al título en Francia. El reinado del Lyon había acabado hacía tres años y nadie podía prever que el equipo dirigido por René Girard se impondría al reciente proyecto catarí del París Saint Germain.
El impacto de Bedimo y Hilton en defensa, la eclosión de Giroud (con 21 goles) en ataque y la capacidad de Belhanda en el mediocampo fueron clave para que el Montpellier se proclamase campeón de la primera y única liga de su historia.
Leicester City (2015-16)
En la temporada anterior el Leicester City era colista al acabar la primera vuelta y logró salvarse a falta de dos jornadas para acabar la Liga. Claudio Ranieri llegó por sorpresa sustituyendo a Nigel Pearson al inicio de temporada y, con veterano entrenador italiano en el banquillo, los Foxes comenzaron a hacer historia.
Mientras todos los grandes tropezaban, el Leicester comenzó a encadenar buenos resultados y Jamie Vardy se hinchaba a marcar golazos y a batir un récord de 11 partidos seguidos anotando. Todo el mundo esperaba que el equipo de Rainieri se acabaría cayendo, pero gracias al extraordinario rendimiento de Riyad Mahrez, Jamie Vardy, Kasper Schmeichel, N'golo Kanté, o Wes Morgan, el Leicester protagonizó el último gran milagro del fútbol Mundial.